Isla Chira, ubicada a 40 kilómetros de Puntarenas, ha sido escenario de un aumento significativo en actividades criminales, particularmente en el narcotráfico.
La isla, conocida por su tranquilidad y belleza natural, ha visto cómo su paz se ve interrumpida por la presencia de una organización criminal originaria de Limón que ha establecido operaciones en la región.
Desde hace aproximadamente un año, la organización criminal ha convertido a Chira en un punto estratégico para el tráfico de drogas.
La elección de la isla se debe a su accesibilidad para el desembarco de lanchas cargadas con estupefacientes provenientes de Suramérica, facilitando la distribución tanto para el consumo local como para la reexportación a mercados internacionales.
Los residentes de las comunidades cercanas, como Nancite y Bocana, han reportado un aumento en la intimidación por parte de los miembros de la organización, quienes buscan consolidar su control sobre la isla y sus alrededores.
Las autoridades locales están preocupadas por la creciente influencia del crimen organizado en estas áreas, donde el tráfico de drogas está afectando tanto a la seguridad como a la calidad de vida de los habitantes.
El 6 de marzo, representantes del Poder Judicial, incluyendo al Fiscal General Carlo Díaz y al director del OIJ Randall Zúñiga, visitaron la isla para reunirse con los residentes y abordar sus inquietudes.
Durante la visita, también se destacó la preocupación por el reclutamiento de menores para el narcotráfico, un fenómeno que ha sido identificado en otras regiones de Puntarenas.
“El camino de la droga les podrá, a los que decidan ir por ese lado, dar un tipo de satisfacción instantánea, momentánea, pero no va a ser duradera. Lo único que les va a generar es una situación que, como ya lo hemos documentado, es que las personas que decidan traficar droga o colaborar con el tema de la droga, van a tener una vida muy corta”, fueron algunas de las palabras que dio Randall Zúñiga a los estudiantes.
El ministro de Seguridad Pública, Mario Zamora, ha señalado que la expansión de los grupos criminales desde Limón hacia Guanacaste y Puntarenas ha intensificado la violencia en estas regiones.
Allan Obando, director de la Fuerza Pública en Puntarenas, mencionó que la provincia se ha convertido en un corredor crucial para el narcotráfico, debido a su posición estratégica y las rutas de transporte.
“Estamos en una zona de paso, tenemos la Ruta 1 y la Ruta 27, entonces en los abordajes en control de carreteras, nosotros abordamos personas que son de otras nacionalidades y que, por ejemplo, son oriundas de Limón, de la parte norte de nuestro país, que circulan por acá y a algunos de ellos se les encuentran droga o armas no permitidas que son decomisadas”, explicó Obando.
Las autoridades están intensificando sus esfuerzos para contrarrestar estas actividades criminales y restaurar la seguridad en Isla Chira.
La colaboración entre la Fuerza Pública, el OIJ y el Ministerio Público continúa siendo esencial para enfrentar los retos que presenta el aumento del crimen organizado en la región.
