En los últimos tiempos, han aumentado los anuncios fraudulentos de alquileres que tratan de engañar al usuario con viviendas inexistentes o a un precio muy alejado de la realidad.
Muchas personas buscan por Internet y encuentran anuncios de casas o apartamentos con buena ubicación, buen diseño y con un muy buen precio, por lo que deciden contactar al arrendador para que les facilite más información.
Tras un primer contacto, el supuesto dueño de la vivienda dice estar muy interesado en alquilarla y el único inconveniente es que no se encuentra físicamente en el país o que no puede asistir de manera presencial. Sin embargo, decide enviar las llaves y el contrato del alquiler, para que las personas paguen una cantidad económica por adelantado a modo de “fianza” para iniciar los trámites. También, ofrece la posibilidad de pagar el costo total del alquiler por adelantado, para obtener un supuesto descuento.
Para llevar a cabo esto, solicitan que los pagos se realicen a través de transferencias de dinero por aplicaciones como Paypal, o bien, por sitios web fraudulentos que simulan ser páginas de Airbnb, Vrbo, Booking, entre otras.
Este modus operandi suele terminar en estafas. Por esto, es importante que las personas conozcan si el arrendador no se identifica, o lo hace de forma deficiente, si solo ofrece dirección de correo electrónico o teléfono como vía de contacto, si no facilita documentación que demuestre que realmente la casa es de su propiedad, si solicita dinero por adelantado, sin ofrecer ninguna garantía de que se va a recibir el contrato del alquiler y las llaves, si los sistemas de pago que ofrece no son fiables, si da la excusa de que no se encuentra en el país y pide a un intermediario enseñar la casa, si el anuncio presenta “súper descuentos”, el costo de la vivienda es muy inferior al valor de mercado, cuando el anuncio no presenta un español claro y parece una traducción automatizada y si el anuncio contiene fotos genéricas del lugar que han sido copiadas de Internet y poseen diferentes marcas de agua.
“Navegando por Internet nos vamos a encontrar de todo, pero tenemos que estar atentos para no caer en estos fraudes en línea. Cuando vean este tipo de información, lo primero que hay que hacer es denunciar ante las autoridades judiciales porque se trata de ciberdelincuentes que buscan de forma muy atractiva robarles el dinero de manera sencilla aprovechándose de la necesidad de buscar vivienda. Es necesario identificar a esa persona o grupo cibercriminal para bloquear las páginas donde ellos hacen todos esos trámites”, explicó Marvin Jiménez, de la comisión de Ciberseguridad del Colegio de Profesionales en Informática y Computación (CPIC).
Entre las recomendaciones que brinda el experto del CPIC, están:
Si el anuncio facilita un número de teléfono, es necesario una búsqueda en Google, ya que podría tratarse de un número de fax que pertenece a una empresa la cual no tiene nada que ver con el anuncio.
Copiar la URL de la imagen que proporciona el anuncio y realizar una búsqueda en Google, si la misma imagen es utilizada para anunciar una casa que está en San José y también en Alajuela, hay que sospechar.
Antes de efectuar ningún tipo de transacción económica, es importante asegurarse de que el propietario haya proporcionado toda la información y documentación necesaria para el cumplimiento legal de la operación.
Si la oferta se encuentra publicada en una página que no se conoce, se pueden hacer averiguaciones sobre la fiabilidad de las operaciones. A veces, tras una pequeña búsqueda en Internet, se puede encontrar cientos de usuarios que han sido víctimas de fraude del portal.
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