Regionales
Familias de Isla de Chira e Isla Venado cumplen sueño de tener vivienda digna
15 familias son las primeras formalizar el proceso para iniciar la construcción de las casas.
Doña Florencia Montes y don Carlos Reyes son habitantes originarios de Isla Chira. Durante 36 años han vivido en una casa que, aunque le han intentado hacer mejoras y arreglos, no está en buenas condiciones. Desde hace más de 10 años esperaban la aprobación de un bono de vivienda para poder tener un techo en mejores condiciones.
«Estamos muy felices, porque estamos viendo el fruto de la espera de tantos años. Esto era algo que no se esperaba, que era imposible, que nadie pensaba que iba a ser cierto, pero que hoy vemos hecho una realidad», mencionaron don Carlos y doña Florencia, matrimonio beneficiado.
Así como don Carlos y doña Florencia, a través de Coopenae, 15 familias de Isla Chira (10) e Isla Venado (5) tendrán una casa digna, gracias a la implementación de la Ley 9779, la cual ha permitido no solo la protección legal de las islas costarricenses, sino también ofrece el acceso a vivienda para sus habitantes.
No obstante, esto no era posible antes del 3 de diciembre de 2019, cuando entró en vigor la Ley 9779, que posibilita al Banco Hipotecario de la Vivienda (BANHVI) a emitir bonos de vivienda a los habitantes de territorios insulares, abriendo así nuevas oportunidades para la población local.
«Este proyecto histórico es un testimonio del poder de la comunidad y la solidaridad. Desde que el proyecto ingresó a Coopenae en septiembre de 2022, ha sido un viaje de perseverancia y solidaridad. Expertos en vivienda social y técnicos ingenieros han trabajado incansablemente para superar los obstáculos presentados por la ubicación de las propiedades en los Territorios Insulares. Y gracias a la Ley 9779, cada paso dado ha sido hacia adelante en la búsqueda de justicia social y equidad para estas familias costarricenses», afirmó Nazira Burgos, gerente de Relaciones Institucionales de Coopenae.
Las familias beneficiarias están compuestas por núcleos jefeados por 10 mujeres y 5 por hombres, dedicados mayoritariamente a la pesca. En total, se impactará a 45 personas de las cuales 20 son menores de edad.
La inversión del proyecto de vivienda asciende a ₡258 millones.
Características de las soluciones habitacionales.
Las viviendas por construir son mampostería reforzada. Existen dos tipos de vivienda según el tipo de núcleo familiar.
Para la vivienda de 42 m2: en las cual el núcleo familiar está compuesto por máximo cuatro miembros; se tienen las áreas de sala -cocina-comedor, dos dormitorios, zona de pilas, servicio sanitario y corredor. Mientras que para la vivienda de 50 m2, en la cual el núcleo familiar está compuesto por cinco o más miembros; se tienen las áreas de sala-cocina-comedor, tres dormitorios, zona de pilas, servicio sanitario y corredor
Requisitos de los beneficiarios. Según lo establecido en la Ley 9779, los requisitos para postularse al bono insular incluyen ser parte del censo realizado por el IMAS, ser mayor de edad, contar con una construcción con fines habitacionales, tener posesión del terreno de manera continua durante al menos diez años (es decir habitar en el sitio, ya que por la naturaleza de la zona los terrenos no están inscritos en el Registro Nacional) y cumplir con los requisitos socioeconómicos establecidos.
Las viviendas propuestas no son solo estructuras de concreto, son hogares donde se construirán memorias y se forjarán sueños. Con características diseñadas para resistir el paso del tiempo y proporcionar un ambiente seguro y cómodo, estas casas serán el refugio de familias cuyo sustento proviene de la pesca en la zona.
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