Después de seis años de gestión, la comunidad de Playa Santa Teresa y alrededores verá finalmente sus calles asfaltadas.
El Concejo Municipal de Cóbano, en una decisión del pasado 10 de septiembre, aprobó el inicio de las obras para mejorar y rehabilitar los sistemas de drenaje y la calzada del camino entre Playa del Carmen y Quebrada del Carmen.
Actualmente, el 90% de los 218 kilómetros de red vial en la zona está en lastre o tierra, lo que genera problemas graves para la salud, especialmente en la época seca. El polvo levantado por los vehículos afecta a las comunidades cercanas, incrementando los riesgos para la salud pública.
Lucha Legal y Ambiental
Este logro es resultado de la persistencia de Wálter Brenes, abogado y ambientalista, quien en febrero de 2018 inició la lucha para lograr la reparación y asfaltado de las vías.
Brenes demandó al Concejo y llevó a cabo múltiples gestiones para que se aprobara este proyecto, vital para la región turística.
Brenes exigió a la Municipalidad de Puntarenas y al Concejo Municipal de Distrito de Cóbano la construcción de una nueva carretera que cubriera los 21 kilómetros de la ruta entre Montezuma y Playa Cocal del Peñón.
Tras varios años de lucha, lograron un acuerdo entre Brenes, Ronny Montero (intendente de Cóbano), y Randall Chavarría Matarrita (alcalde de Puntarenas), lo que permitió avanzar con las aprobaciones necesarias.
Beneficios para la Comunidad
El asfaltado beneficiará no solo a Santa Teresa, sino también a Delicias, Playa Carmen, San Isidro, Cabuya, Cóbano, Bello Horizonte y La Esperanza.
Además de las mejoras en las calles, el proyecto incluye la reparación del sistema de alcantarillado, señalización y la construcción de cunetas y cordones de caños.
Santa Teresa, reconocida por su crecimiento turístico y famosa por sus playas, ha enfrentado durante años el deterioro de sus caminos.
El estado actual de las vías ha dificultado la movilidad y afectado el desarrollo del turismo en la zona.
Impacto en el Turismo y la Comunidad
La infraestructura vial deficiente ha sido uno de los mayores obstáculos para el crecimiento de Santa Teresa como destino turístico.
Las malas condiciones de las vías, especialmente en la temporada de lluvias, han limitado el acceso y perjudicado tanto a los habitantes como a los visitantes. Con este nuevo proyecto, se espera una mejora significativa que fortalecerá la economía local y el turismo.
