- Hidratación, alimentación, vestimenta y calentamiento son las principales recomendaciones para el cuidado de la salud y un mayor rendimiento durante el trayecto.
- Pacientes crónicos deben ser respetuosos con su tratamiento y portar sus medicamentos para disminuir el riesgo de descompensaciones.
Muchos costarricenses caminan desde diferentes lugares hasta el Santuario Nacional de Nuestra Señora de los Ángeles para agradecerle por algún milagro concebido o a pedir una petición especial. Es por eso que la Caja Costarricense del Seguro Social pide a los romeros que se cuiden durante el trayecto que realizan para llegar a Cartago.
El Dr. Marco Vinicio Boza Hernández, especialista en medicina interna, antes de emprender cualquier recorrido que comprenda numerosos kilómetros, es importante considerar el lugar desde dónde se realizará el trayecto, a fin de determinar si la persona se encuentra en un adecuado estado físico y pueda realizar la caminata sin que implique un riesgo para su salud.
Según el especialista, esta valoración es indispensable al momento de iniciar cualquier actividad física de manera responsable, toda vez que, evidencia el nivel de las capacidades y las limitaciones que dispone la persona al momento de plantear el objetivo de participación.
Enfatizó que esta evaluación es particularmente importante en personas con padecimientos crónicos, tales como hipertensión, diabetes u otros que estén planeando participar en la romería y deban estar atentos a las capacidades y limitaciones para participar en la actividad, a fin de reducir el riesgo de descompensaciones producto del esfuerzo físico que demanda.
Previo al inicio del recorrido, explicó, es indispensable considerar el tipo y las irregularidades del terreno por el que se va a transitar para tomar las previsiones necesarias que prevengan desbalance, pérdida de equilibrio, tropiezos, caídas u otro accidente que pudiera ocasionar lesiones importantes.
Luego del planteamiento inicial, aseguró que es necesario destinar entre 10 y 15 minutos para la fase de calentamiento y estiramiento, que son determinantes, a fin de disminuir los habituales calambres, así como lesiones musculares y articulares.
Otra de las recomendaciones citadas por el especialista consiste en elegir un calzado adecuado, flexible y confortable, preferiblemente, el que se utilizó durante la preparación para la romería y descartó llevar zapatos nuevos, lo anterior para evitar la aparición de molestas ampollas en los pies.
No se recomienda el uso de sandalias o zapatos tipo “flat”, que incrementen el riesgo de dolores musculares, lesiones articulares, pérdida de equilibrio, tropezones o caídas.
Las medias de algodón y ropa cómoda confeccionada con textiles especiales que permitan una adecuada transpiración son esenciales como parte de la indumentaria.
Conviene, también, tomar en cuenta los cambios de temperatura durante el trayecto hacia la Basílica de Cartago, por lo que la capa, la sombrilla y la ropa impermeable resultan útiles ante las altas probabilidades de lluvias que pudieran presentarse durante los días de la caminata.
Asimismo, las prendas que se elijan deben tener colores reflectivos, con el propósito de facilitar la visibilidad durante la noche, por el contrario, si el recorrido se realiza durante el día, se deben utilizar prendas de color blanco que repelen los rayos solares y evitar los colores oscuros, pues concentran más el calor.
“Es de suma importancia mantener una adecuada hidratación antes, durante y después de la caminata y no esperar hasta sentir sed. De preferencia se debe elegir agua y bebidas hidratantes si el trayecto se prolonga por más de una hora. Los jugos, las gaseosas u otras presentaciones con alta carga de azúcar y calorías, conviene evitarlos”, aconsejó el especialista.
La necesidad de utilizar bloqueador solar con un alto factor de protección, así como portar gorra o sombrero que, también, protejan la nuca y las orejas, son previsiones fundamentales para evitar la sobreexposición a los rayos ultravioleta y disminuir la posibilidad de sufrir quemaduras u otras lesiones en la piel.
En cuanto a la nutrición durante el recorrido, el Dr. Boza manifestó que la alimentación dependerá de la tolerancia y el tipo de ejercicio que realice cada persona, sin embargo, aseguró que las opciones de comida sencilla, de compra directa en supermercados o de fácil elaboración, son las más recomendadas durante la peregrinación.
Se trata de pequeñas meriendas que ayuden con la energía e hidratación necesarias, para completar con éxito el recorrido.
Entre las principales recomendaciones figuran las frutas, semillas secas, galletas bajas en calorías y azúcar, yogurt, emparedados, agua y bebidas hidratantes.
¡Tenga en cuenta las siguientes recomendaciones para una caminata segura y saludable!
- Porte siempre documentos que le permitan ser identificado y que pudieran ser requeridos en caso de hospitalización, protéjalos de la lluvia y guárdelos en bolsa plástica.
- Evite viajar solo e informe a su acompañante en caso de sufrir alguna enfermedad. Indíquele donde se encuentran sus documentos, las dosis y el nombre del medicamento que podría requerir además de a quién informar en caso de ser necesario.
- Si viaja con niños recuerde estar siempre pendiente de sus acciones. No los pierda de vista, cada uno debe portar un documento que lo identifique y que indique con quien comunicarse en caso de extraviarse entre la multitud.
- El cuerpo siempre indica cuando algo no marcha bien, se debe prestar atención a las siguientes señales: si se siente cansado no fuerce a su organismo, deténgase y espere hasta restablecerse por completo.
- Si sufre de calambres o espasmos musculares realice suaves movimientos de flexión antes de realizar cualquier masaje.
- No lleve demasiado peso, cargue una mochila con lo básico: papel higiénico, foco, abrigo, capa y sombrilla, documentos para identificación personal y datos adicionales como dónde y a quién informar en caso de ser necesario.
- Si padece alguna enfermedad crónica, consulte con el médico la posibilidad de emprender el recorrido y si tiene la autorización médica para realizarlo, tome la ruta con calma y sea respetuoso con el horario de la toma de su tratamiento, porte siempre los medicamentos en forma adecuada para evitar complicaciones de salud y el riesgo de descompensaciones durante el trayecto.
- Acuda a los puestos de asistencia de la Cruz Roja ante cualquier contratiempo, el personal está capacitado para la valoración respectiva y el traslado en caso de que se requiera atención en algún centro médico.
- Elija realizar la romería por la “ruta segura” dispuesta por las autoridades de Tránsito y de Fuerza Pública.
El Dr. Boza manifestó que, una vez finalizado el recorrido, se recomienda iniciar la fase de recuperación con ejercicios de baja intensidad que permitan recobrar los signos cardiacos, deben ser de tipo progresivos y muy pasivos como estiramientos y ejercicios de respiración, hasta recuperar la frecuencia cardiaca normal.
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