Migraña afecta al 20% de la población y el Botox emerge como una solución efectiva

La migraña se sitúa entre las veinte enfermedades más incapacitantes a nivel global, afectando significativamente la calidad de vida de quienes la padecen, según la Organización Mundial de la Salud. De hecho, en Costa Rica cada año al menos 30 mil asegurados se incapacitan por dolores de cabeza, en la mayoría de casos se trata de migraña, así que el dolor viene acompañado de náuseas, vómito, adormecimiento de las manos, entumecimiento de la lengua, sensibilidad a la luz y al sonido.

Aunque es común en diversas edades, su prevalencia es mayor entre adolescentes y personas en edad productiva, afectando desproporcionadamente a las mujeres, quienes experimentan este dolor debilitante hasta tres veces más que los hombres.

Uno de los avances más notables en el tratamiento de la migraña crónica es el uso de Botox, aprobado en 2010 por la FDA para este propósito.

El Dr. Pablo Thames, especialista en Medicina Clínica, Estética y Antiaging, destaca que “el Botox ha demostrado ser altamente efectivo, con un 70% de los pacientes que reportan una disminución del número, de la intensidad y frecuencia de las crisis”.

Aunque en sus inicios este tratamiento terapéutico era muy costoso y reservado para personas de altos ingresos, hoy en día se ha vuelto más accesible, eso sí, debe ser realizado por personal médico entrenado con amplio conocimiento de la toxina botulínica, su correcta aplicación y abordaje de la patología.

El tratamiento con Botox consiste en inyecciones localizadas en áreas clave como la frente, el cuello y los hombros, y debe repetirse cada tres meses. Es especialmente útil para quienes sufren crisis de dolor de cabeza más de 15 días al mes, mínimo 3 meses y que no han respondido al menos a dos de los tratamientos preventivos de la migraña. Sin embargo, este procedimiento no es recomendado para mujeres embarazadas o en periodo de lactancia.

A pesar de los beneficios que ofrece, en Costa Rica aún no se cuenta con un registro formal del uso del Botox para migrañas, aunque los especialistas aseguran que cada vez más personas optan por este tratamiento para mejorar su calidad de vida.

Con el Día Internacional de Acción contra la Migraña celebrándose el 12 de septiembre, es crucial concienciar a la población sobre esta enfermedad y las opciones terapéuticas disponibles para quienes la padecen. Como señala el Dr. Thames, “aunque el Botox no cura la migraña, ha cambiado la vida de muchos pacientes al reducir considerablemente los días de dolor, mejorando su bienestar general”.

Además de subregistro, otra dificultad que se da es que los pacientes que acuden al Seguro Social, son atendidos inicialmente por médicos generales y en la mayoría de las veces catalogan el padecimiento como simple dolor de cabeza y no como migraña. También se dan los casos en que los mismos pacientes se automedican y alivian los síntomas sin buscar la causa, el diagnóstico y un tratamiento efectivo.

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