- Guardacostas realizó coordinaciones para rescatar a un marinero que sufrió un accidente a 944 millas náuticas (1.748 kilómetros) de Cabo Blanco
- Cuatro paracaidistas de la Fuerza Aérea de Estados Unidos se lanzaron hacia un buque desde una aeronave para dar soporte médico al pescador herido
Gracias a la efectiva coordinación del Servicio Nacional de Guardacostas (SNG) del Ministerio de Seguridad Pública, sus homólogos de Estados Unidos y un buque panameño, un costarricense fue rescatado debido a que mientras pescaba sufrió un accidente a 944 millas naúticas (1.748 kilómetros) de Cabo Blanco en Puntarenas.
El Guardacostas recibió una alerta durante el pasado viernes 7 de julio, mediante la cual les informaban que el marinero de la embarcación pesquera de nombre: “Victoria G” sufrió dos golpes en la cabeza contra una polea, situación que le generó traumas, sangrado y dolores que ponían en riesgo su vida.
El accidente ocurrió fuera de aguas nacionales, así los guardacostas contactaron a los estadounidenses, quienes efectuaron varias acciones que permitieron a un buque panameño que iba a Colombia responder al llamado y acercarse a la embarcación pesquera, para realizar el transbordo del herido y una vez seguro continuar su trayecto.
Cuando el herido de apellido Álvarez, de nacionalidad costarricense y de 26 años se encontraba en dicho buque, una aeronave del Gobierno de los Estados Unidos llegó al sector, de esta forma cuatro pararescatadores (paracaidistas) de la Fuerza Aérea de EEUU se lanzaron para iniciar las maniobras de apoyo médico.
Al mismo tiempo, dos lanchas interceptoras del Guardacostas de Caldera en Puntarenas se movilizaron para topar al mercante, esto con el fin de trasferir al hombre y transportarlo a tierra lo más rápido posible. Igualmente, coordinaron con la Cruz Roja Costarricense para la atención y transporte del nacional a un hospital.
Es así como, después de haber finalizado todos los traslados, las autoridades del Guardacostas, el martes 11 de julio del 2023 llevaron al paciente a la Estación de Guardacostas de Caldera, donde los paramédicos de la Cruz Roja Costarricense lo trasladaron a un hospital y sus familiares lo recibieron luego de cinco días de angustia.
Maniobras que salvan vidas.
El rescate se centró en maniobras de transferencia de Álvarez, primero de la embarcación donde se accidentó al buque panameño que colaboró y que lo trasladó hacia una embarcación interceptora del Guardacostas. A lo que se suma la vital participación de un avión y los cuatro para rescatadores estadounidenses, así como las destrezas del personal para mantener al herido a salvo, pues el buque no deja de navegar.
Mientras las naves están en movimiento y a una alta velocidad, también realizaron el traslado del paciente y los rescatistas, el operador de la embarcación interceptora de Guardacostas siguió el ritmo paralelamente al mercante para culminar con éxito el transbordo. Una vez en tierra, era esperado por cruzrojistas que lo movilizaron al hospital local para su pronta atención. Se trato de cinco días de arduo trabajo que lograron salvar una vida.
ACLARACIÓN el pescador herido fue llevado a la Estación del Guardacostas de Caldera en Puntarenas.
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